De las muchas recetas que tengo atrasadas, ésta es una de las que más me han sorprendido, por su sencillez y su sabor. Nunca había probado el vino de Oporto y no estaba muy segura de cómo sería el resultado, pero estuvo realmente rico y enseguida dimos buena cuenta de toda la salsa.
Ingredientes para 2 personas:
- 2 bistecs de ternera
- 3 chalotas
- 1 vaso de vino de Oporto
- Mantequilla
- Sal
- Perejil
- 2 Patatas (u otra guarnición)
Calienta una sartén con un poco de mantequilla para freír los bistecs, previamente salpimentados. Una vez la mantequilla deshecha, sin dejar que empiece a hacer espuma y ponerse marrón, pon los bistecs y fríelos brevemente por cada lado, para que queden tiernos y todavía rojos por el centro.
Retira los bistecs y resérvalos, sin que se enfríen demasiado.
En la misma sartén de la carne, añade las chalotas peladas y picadas finas, con un poco más de mantequilla si hace falta. Cuando estén doradas, incorpora el Oporto y deja que se reduzca poco a poco.
Sirve los bistecs y reparte la salsa por encima, espolvoreando con perejil lavado y picado.
Como guarnición puedes servir unas patatas asadas. En el caso de la foto, era la primera vez que las hacía en el microondas, ya que no soy muy fan del mismo pero andaba corta de tiempo. Para hacerlas así, corta las patatas por la mitad, rocíalas con un poco de aceite y ponlas en un recipiente que pueda ir al micro. Cubre el recipiente con film, agujeréalo y mételo al microondas entre 7 y 10 minutos, dependiendo del tamaño de las patatas y la potencia del aparato.
Para dar el toque final a las patatas, puedes espolvorear un poco de pimentón y algo de perejil si lo deseas.