Ingredientes para 1 litro:
- 250 gr de chufas - las podéis conseguir en tiendas de frutos secos y legumbres
- 800 ml de agua
- 2 cucharadas de azúcar
Tres ingredientes, simple, verdad? Aunque he indicado unas cantidades orientativas, puedes modificarlas (si te gusta más concentrada, más dulce...)
Pon las chufas en remojo durante al menos 8 horas. Si puedes dejarlas de un día para otro mejor. Guárdalas en la nevera si hace mucho calor y cámbiales el agua un par de veces en todo el tiempo.
Una vez las chufas se hayan inflado (en la foto se aprecia que el grano de la derecha ha crecido y su piel está más lisa), pon la cantidad que quieras en un recipiente, añade un poco de agua y pásalas por la batidora. El agua se irá tiñendo de blanco, a la vez que se forma una pasta que deberás exprimir. Para ello, yo utilicé un colador chino.
Una vez tengas el líquido colado, comprueba que la cantidad de agua es la quieres que lleve. Si te ha quedado muy concentrada, siempre puedes añadir más. Échale azúcar, refrigera y lista para tomar.
Se puede guardar en la nevera hasta 2-3 días.