¿Recordáis la entrada anterior? Como os comentaba al final de la misma, en cada paquete de pasta para wonton vienen un montón de láminas así que no quise desaprovecharlas y se me ocurrió que podía meterlas en el horno y repartir algunas semillas por encima... El resultado fueron estos fantásticos crackers, perfectos para tomar solos o con algún dip (véase Hummus o Tzatsiki, mis favoritos).
Para conseguir un mejor color y que las semillas no se caigan, pinta los wonton con mantequilla fundida antes de meterlos al horno a 180º. Retíralos cuando estén dorados.